Los programas de “reskilling” y “upskilling” son cruciales para que las plantillas de las grandes empresas, especialmente aquellas del sector “tech” y de las telecomunicaciones, estén familiarizados con las últimas tendencias digitales
La verdad es que el conocimiento no se acaba nunca. A medida que el mundo cambia y evoluciona lo hacen a la vez los conocimientos, nuestra perspectiva y experiencia de las cosas. Si todo avanza es gracias a la ciencia y a los nuevos conocimientos que esta produce, y estos avances, a su vez, posibilitan la creación de más conocimientos, ideas e información. Si partimos de este punto, no tiene sentido que la educación se mantenga intacta mientras todo a su alrededor está cambiando. Educar es precisamente formar para el mundo, dotar de herramientas y competencias a los ciudadanos y profesionales de una sociedad determinada en un momento histórico concreto. En nuestro caso, la sociedad tecnológica y digital de comienzos del siglo XXI.
Parte de esa visión desfasada de la formación es pensar que solo se educa en el colegio y la universidad y que, una vez fuera de las aulas, no es necesario seguir adquiriendo nuevos conocimientos. En este mundo cambiante e imprevisible, también las empresas deben asumir su responsabilidad en la transmisión de las habilidades y aptitudes necesarias. Algunas de las empresas más punteras del sector tecnológico y de las comunicaciones, como es el caso de Telefónica, han comprendido que es crucial proseguir con la formación de sus empleados para no quedarse atrás.
Para lograrlo, la compañía puso en marcha hace ya una década-en 2012 más de la mitad de su plantilla participaba en ellos- una serie de programas de “reskilling” y “upskilling” con el objetivo de cerrar la brecha de competencias entre sus empleados. Telefónica se ha fijado la meta de que el 50% de sus trabajadores en todo el mundo reciban capacitación anual. En 2021 esa cifra alcanzó al 70% de la plantilla.
La idea de fondo es que la empresa pueda ir disponiendo de perfiles especializados capaces de asumir las tareas requeridas por la estrategia de Telefónica. En un mercado altamente cambiante como es el tecnológico, las empresas tecnológicas necesitan profesionales con unas habilidades digitales, humanas y de liderazgo a la altura de los retos del presente. Power of Connections, un programa cuyo objetivo ha sido inspirar, conectar y alinear a las personas de la compañía alrededor del propósito, visión y cultura de Telefónica.
Se trata de trazar un plan coherente, en constante revisión y en consonancia con las nuevas necesidades de la compañía. Gracias a la gran escala de Telefónica, y a su implantación en numerosos países, la empresa puede permitirse crear sinergias entre diferentes iniciativas en todo el grupo y enriquecer así la experiencia de aprendizaje. Buen ejemplo de ello son los programas de Telefónica en Brasil, donde está poniendo al día a todos sus empleados en competencias digitales; o en Alemania, que está implementando programas de formación en metodologías agile y análisis de datos.
Formación a todos los niveles
Si de lo que se trata es de alcanzar la máxima eficiencia y competitividad, lo más adecuado es ofrecer todo un abanico de comunidades y proyectos de aprendizaje que cubran un amplio espectro de conocimientos y habilidades. En esa línea se enmarcan las llamadas comunidades de conocimientos, en las que grupos de empleados de Telefónica intercambian y comparten saberes en torno a tecnologías como el Blockchain, Cloud, Big Data, ciberseguridad y trabajo en la nube.
Otro de los proyectos es la IT & Network Academy, un centro de enseñanza abierto a toda la plantilla y que ha ofrecido hasta ahora cerca de 40 cursos expertos sobre los temas más diversos: 5G, criptografía cuántica, tecnologías de conectividad en el hogar… También centrado en las competencias digitales, aunque se encuentre en un nivel más básico, está el programa Digital Way. Ahí es donde todos los empleados de Telefónica pueden acceder a clases de introducción al Big Data o dar sus primeros pasos como programadores.
A esto hay que sumarle una oferta formativa en idiomas (inglés, español, alemán y portugués) y los nuevos programas que se implementarán este próximo año. A través de Universitas, la universidad corporativa de Telefónica, los trabajadores de la empresa tendrán la oportunidad de familiarizarse con algunas tecnologías emergentes que, ya sin lugar a duda, serán las que conformen el mundo del mañana: NFT, metaverso, Web3…
Telefónica es consciente que estas tecnologías, y otras como la inteligencia artificial o la robótica, deben integrarse en cualquier gran empresa que aspire a ser competitiva en el mercado. Y ello requiere contar con el talento adecuado en el momento oportuno. Ese es el sentido de los planes de “reskilling” y “upskilling” de Telefónica, orientados a que la empresa puede cubrir sus necesidades estratégicas sin necesidad de recurrir a compañías externas. Ante la incertidumbre del mundo exterior, hay que proveerse de talento y conocimiento dentro de casa.
Especiacialización en “blockchain” y 5G para tener un trabajo en el futuro
En Telefónica España, una de las empresas que lidera en nuestro país la evolución tecnológica en ámbitos como la Inteligencia de las Cosas, “Blockchain” o 5G, la actualización continua y el desarrollo de capacidades es si cabe aún más relevante para mejorar laboralmente. Por ese motivo, todos los profesionales de la empresa en España pueden participar en los programas de aprendizaje que fomenta la compañía.
Convertirse en una empresa más ágil, más inclusiva y digital pasa por anticipar los perfiles que va a precisar el negocio en el futuro, y por conocer el talento del que dispone en el presente. De lo primero se encarga su programa de Strategic Workforce Planning, ocupado en identificar la demanda de habilidades críticas para el negocio a medio y largo plazo.
Para conocer los perfiles actuales de los que dispone, y las carencias a cubrir, Telefónica ha implantado un proceso de valoración digital para que todos los profesionales puedan valorar sus capacidades asignadas. A través del análisis de datos, la empresa es capaz de anticipar las necesidades de talento, de proponer acciones formativas y preparar nuevos contenidos en función de las carencias de la plantilla. De este modo, la empresa puede ir cubriendo sus déficits de conocimientos mediante un programa de formación continua y personalizada, en el que cada empleado es el centro del proceso.
En concreto, Telefónica está volcando sus esfuerzos en varias líneas de actuación. La principal es el desarrollo de perfiles especializados en tecnologías del futuro, como el 5G, la robotización o el Big Data. A esta le acompañan otras líneas complementarias, destinadas a la mejora de las capacidades asociadas a la adaptación y la resiliencia, a la gestión de equipos, nuevas formas de trabajo y otras aptitudes comerciales. Es bien conocido eso de que o te actualizas o mueres. En la sociedad de la información, el conocimiento y la disrupción tecnológica, habría que decir mejor que o aprendes o mueres.