Técnica de estudio "Pomodoro"

En realidad esta técnica es muy sencilla, porque solo consiste en dividir tu tiempo con una estrategia o proporción concreta. Así sería la estructura:

  1. Escoges una tarea que quieres completar
  2. Preparas un temporizador (con alarma) y lo pones a 25 minutos
  3. Trabajas sin parar en esa tarea hasta que suene la alarma. Cuando suene, habrás completado un “pomodoro”
  4. Tomas un descanso de 5 minutos, lo que se podría llamar un descanso, descanso corto o micro-descanso.
  5. Repites el proceso
  6. Al llevar 4 pomodoros, tomas un descanso de 15–20 minutos. A este lo podemos llamar descanso largo.

¡Y ya está, es así de sencillo!

Al usar esta técnica debes tener en cuenta estos consejos para sacarle el máximo partido.

objetivo  Concéntrate en una sola cosa

La base de la técnica pomodoro y el sentido que tiene está en que te centres en solo una tarea. No debes permitirte tener distracciones mientras estás enfocado durante tus 25 minutos. Eso significa que nada de móviles, ordenadores, televisores ni cualquier otra cosa que te pueda restar foco. 

En este momento estás centrándote en la tarea que quieres terminar, y debes tomarte estos 25 minutos como algo sagrado. Esta es una norma esencial sin la cual el pomodoro no funcionará, perderá su sentido, así que tenlo muy en cuenta. 

Si vives con otras personas que tienden a interrumpirte, déjales claro que vas a necesitar la máxima concentración posible y si hace falta háblales sobre este método. Quién sabe, tal vez ellos también quieran apuntarse a probarlo. 

Es importante que tengas siempre recursos y herramientas para evitarte distracciones. Un truco que funciona muy bien es tener a tu lado siempre una hoja en blanco por si se te ocurren ideas o tareas para hacer, aunque sean tonterías. 

Si apuntas todo eso en la lista, luego podrás repasarla o hacer lo que quieras cuando estés en tus descansos largos. ¡Ahora lo que toca es trabajar!

descanso  Cuando descanses, descansa de verdad

Descansar bien es lo segundo más importante de esta técnica, o te desgastarás. Durante el descanso es importante que desconectes de la tarea que estabas haciendo, sin embargo hay un par de matices. 

Debes tener en cuenta que el descanso es para recuperarte, pero tampoco puede ser un momento en el que pierdas todo el hilo de lo que estabas haciendo. Si pretendes dividir una gran tarea en varios pomodoros es importante que durante los descansos cortos no hagas algo que te desconecte completamente. 

Un buen descanso corto sería, por ejemplo, irte a otra habitación y cerrar los ojos, dejando la mente en blanco o ponerte música instrumental. La idea es que tu mente entre en estado de stand by para regenerarse, no que la estimules con videojuegos o cosas similares. 

Por supuesto, cuando lleves cuatro pomodoros te apetecerá desconectar un poco, así que durante el descanso largo ya podrás hacer lo que quieras, ya sea esto pasear al perro, comer, hablar con tus amigos, etc. 

¡Respeta esos 20 minutos! No son pocas las ocasiones en las que te verás tentado a alargar el descanso. Si ves que estás muy cansado, puedes intentar alargarlo a 30 minutos. 

En el caso de que notes que la cosa va más allá y te empiezas a marear o algo parecido será mejor que no fuerces a la máquina. Sí, es importante que te concentres, pero también nos importa tu salud. 

lista de deseos  Prepara una lista

Una de las mejores cosas de usar la técnica Pomodoro durante un tiempo es que puedes acabar siendo capaz de prever la cantidad de tareas que puedes hacer durante el día, sabiendo cuántos pomodoros vas a tardar en cada una. 

Por eso, es interesante que antes de empezar con tu sesión prepares una lista con todas las cosas que quieres hacer. Tal vez ese día quieres dedicarlo a subrayar, repasar y realizar esquemas. La idea es que lo hagas todo en el orden lógico y priorizando siempre las tareas más importantes primero. 

En el caso de que tengas muchas tareas en mente, no te preocupes, es normal al principio. Tú haznos caso y hazte un ránking con todo lo que quieres hacer.

Al aplicar esta técnica, te darás cuenta de que eres mucho más eficiente de lo que crees, y verás como acabas poco a poco con todo lo que tienes pendiente.

temporizador  Usa un buen temporizador

El complemento obligatorio al aplicar esta técnica es tener un buen temporizador que te permita controlar bien el tiempo para poder hacer los pomodoros como debes. Más adelante en este artículo tienes varias opciones de aplicaciones de pomodoro para cualquier plataforma, pero puedes empezar usando el cronómetro de tu móvil. 

Prepara tus oposiciones con el método pomodoro

¿Sabes por qué el método pomodoro es tan ideal para las oposiciones? La realidad es que, como bien sabes, estudiar es una tarea intensa, exigente y pesada. Dadas las largas horas que tendrás que pasarte estudiando, esta técnica es ideal. 

El hecho es que, como ya te hemos explicado, esta técnica fue originalmente pensada por un estudiante, precisamente para estudiar ¿En qué otro momento se estudia más que durante las oposiciones? Está claro que en ningún otro, ¡por lo que el método pomodoro es tu salvación!

El hecho de que lo vas a aplicar en tus oposiciones te permitirá ser mucho más eficiente, porque tu cerebro se adaptará más fácilmente al ritmo de trabajo que le propongas, si eres constante. Al tener esta técnica, la cosa irá mucho más fluida cuanto más tiempo lleves aplicándola, porque le estarás dando una estructura de estudio. 

Aplicado a oposiciones, este método podría ir de la siguiente manera: 

  1. Haz una lista general con todas las etapas que tienes pensado pasar durante tus oposiciones (dependiendo de tu método de estudio).
  2. Subdivides estas tareas en otras más pequeñas, hasta que veas que las puedes cumplir en un tiempo determinado. Si pueden hacerse en uno o varios pomodoros, mejor, pero la idea puede empezar por tener un plan general e irlo concretando según la tarea.
  3. Sé estratégico y reparte tus tareas según el orden en el que crees que vas a tener que realizarlas. Ten en cuenta que en algún momento es posible que tengas que cambiar el orden.
  4. Al sentarte delante del temporizador, escoge una tarea para ese día.
  5. ¡Pon el temporizador en 25 minutos y a empezar!
  6. Si has completado una tarea, es hora de tacharla y olvidarte de ella
  7. ¡Pomodoro completado! Haz tu descanso de 5 minutos (de 20 minutos si llevas 4 pomodoros)
  8. Al descansar, aplica los principios que te hemos explicado. Consigue que tu cerebro descanse durante tus duras jornadas
  9. Al acabar el día, haz lo que nosotros llamamos un diario metacognitivo: observa cuánto has logrado hacer con tus pomodoros. Si has tenido distracciones analiza a qué se han debido, y aprende cada día de tus errores.
  10. También te aconsejamos que prepares la lista de lo que vas a hacer mañana, teniendo en cuenta lo que has conseguido y lo que te queda por hacer, así como las ideas y necesidades que te han surgido hoy.
  11. ¡Repite esto cada día hasta dominar todo el temario!

Verás que es muy placentero tachar tareas, ¡hasta adictivo!