¿Qué son las tarjetas para memorizar?
Las tarjetas de memorización, también llamadas tarjetas didácticas o flash cards, pues son eso: tarjetas de cartón que por medio de dibujos o caracteres sintetizan las ideas clave de la información que tenemos que memorizar. Podrás realizarlas en papel, en cartulina, también en formato digital.
A simple vista parece que hablamos de los esquemas o resúmenes que hicimos toda la vida, pero no. La clave de las tarjetas de memoria es utilizar métodos mnemotécnicos para trocear la información y hacerla más ágil y accesible. ¿La clave? Fomentar la capacidad de evocación.
Te permitirán aprovechar tu memoria visual y combinarla con información textual de manera sencilla y dinámica.
A primera vista puede parecer un sistema sencillo y un poco trivial para estudiar. Pero está demostrado que las tarjetas de memorización te servirán de enorme utilidad como síntesis de conceptos de importancia como: definiciones, fórmulas, fechas, artículos legales, etc. Serán además un recurso especialmente cómodo para memorizar correctamente y para llevar a cabo repasos rápidos.
¿Qué tipos de tarjetas para memorizar existen y cómo puedes hacer las tuyas propias?
Si nuestro problema fundamental es la memorización y sobre todo de determinados aspectos de nuestro temario, estas tarjetas didácticas son la mejor alternativa. Veamos un ejemplo de cómo elaborarlas. Anotaremos en la tarjeta una pregunta y en el reverso de la misma tarjeta una serie de palabras clave, símbolos o dibujos que nos evoquen o nos den las pistas para la respuesta.
Es especialmente recomendable reservar un tiempo para elaborar estas tarjetas didácticas inmediatamente después de estudiar un tema. Llevaremos al papel los puntos más importantes y sus respuestas, reducidas a una relación de ideas o imágenes que necesitemos para responderlas de forma correcta.
Los expertos aseguran que un repaso con las tarjetas de entre 5 a 10 minutos al día termina por grabar esta información de forma sistemática en la memoria a largo plazo.
Deberás realizar tus propias tarjetas. Es un error pensar que puedes servirte de las que te preste algún compañero. Elaborar tus tarjetas te llevará tiempo, pero será una forma de trabajar e insistir en el tema que acabas de estudiar.
No lo entiendas como una pérdida de tiempo, cuanto más esfuerzo inviertas en crear esas tarjetas, menos tiempo y esfuerzo deberás dedicar al estudio.
Cambia los tipos de letra y subraya con colores distintos. Intenta salir de la monotonía. Las letras y las imágenes tienen que ser llamativas. Utiliza dibujos relacionados con los conceptos que estás estudiando. Esta relación te llevará a obtener mejores resultados.
Es especialmente recomendable reservar un tiempo para elaborar estas tarjetas didácticas inmediatamente después de estudiar un tema. Plantea los puntos principales y sus respectivas respuestas.
Y ahora, ¿qué tipos existen?
Muchos expertos recomiendan el formato y los resultados del modo manual como más operativo y ágil. No necesitarás grandes habilidades: cartulina o fichas de estudio, colores, rotuladores, papeles de colores. Emplea la imaginación suficiente para que te sea de utilidad. No pierdas tiempo. Se trata de una técnica de estudio para aprovecharlo.
Puedes optar también por el formato digital, escoge un programa con el que te manejes bien (Power Point, Word, Photoshop, etc,) y adelante. Eso sí, en este caso asegúrate de poder verlas desde tu móvil o tablet. Te facilitará los repasos en cualquier lugar.
No obstante, si lo prefieres, dispones de numerosas aplicaciones para elaborar tus tarjetas en formato digital. Podrás personalizarlas y consultarlas desde todos los dispositivos que quieras. En este caso, ya no tendrás que vigilar tan directamente el proceso de elaboración. Echa un vistazo en internet puedes escoger entre distintas herramientas.
Preparar las oposiciones gracias a las tarjetas para memorizar
Las tarjetas didácticas son una metodología de estudio de enorme utilidad sobe todo para agilizar los procesos de memorización como los que se requieren en la preparación de oposiciones. Es cierto que no suponen una solución por si sola. Las tarjetas de memoria son complementarias en nuestro estudio. Lo más aconsejable es que la alternes y las conjugues con otras técnicas de estudio. Puedes verlo aquí.
Para estudiar con las tarjetas de memoria deberás tener en cuenta lo siguiente:
- Participación activa: se trata de un método de estudio que requiere una participación activa. Una vez confeccionadas las tarjetas nos iremos preguntando el contenido de las mismas a lo largo de nuestro estudio de manera recurrente. Así colaboraremos a que se vaya fijando en la memoria.
- Organización: dividiremos las tarjetas dos cajas, una para las que respondemos correctamente y otra para las que todavía no aprendimos. De manera que repasaremos las que fallamos en un período de tiempo menor que las que ya nos sabemos.
- Ahorra tiempo: el principal inconveniente de las tarjetas de memorización es el tiempo que invertimos en elaborarlas. Para evitarlo, podemos marcarnos un número concreto o solo realizarlas en aquellas cuestiones más importantes o las que nos resulten más complicadas de memorizar.
Lo más aconsejable es que la conjugues con otras técnicas de estudio.